domingo, 18 de noviembre de 2012

No nos hace falta

No nos hace falta el licor para sentir la embriaguez del alma,
No nos hace falta quitarnos la ropa para esta desnudos,
Ni escuchar qué pensarán los demás para estar seguros.

No nos hace falta un contrato para entregarlo todo,
Ni comprarle al tiempo las horas para gastarlas enteras,
Porque no nos hace falta nada que no seamos nosotros para estar al otro lado del mundo,
Al otro lado del tiempo, al otro lado de las nubes.

Ahora es claro que, más que nada por convicción,
El viento trae, aún de la callada lontananza,
Las caricias prometidas y los aromas soñados,
Te trajo a vos, a vos tan dulce, tan suave.
Y te reconocí casi de inmediato,
El pago por mi trato,
Mi regalo por el pacto secreto con la luna,
Con el lucero que baña las olas en las noches
Y baila en mis pupilas cuando estás frente a mi.